viernes, 3 de agosto de 2007

Por fin es viernes

Estas tres semanas han sido algo agotadoras, desde la mudanza a mi nuevo hogar hasta una auditoría sorpresa en la empresa. No he tenido tiempo de hacer las cosas que me gustan o de descansar de verdad, todo se me ha ido en revisar trabajo y acomodar mis chucherías. En la mañana salí de mi casa con maleta lista por que me voy este fin de semana a Salamanca para visitar a Cristy, Manolito y Hekutoru. Más les vale estar listos por que pienso reventarme en serio.

Aún estoy en la oficina pero en cuanto me entreguen los análisis de costos y se los devuelva para que los pasen a más limpio (a veces hasta yo me caigo gorda) checo tarjeta y bye, bye.

Últimamente a pesar de lo mucho que me gusta este empleo, empiezo a sentir momentos en los que me sofoca tanto ajetreo, revisa expedientes, analiza procedimientos, autoriza salidas, permisos, etc.. es relativamente fácil pero increíblemente monótono y rutinario.

A ver si al lunes que regrese me siento de mejor ánimo laboral.