jueves, 12 de abril de 2007

Cuando te vi dormido

No pude resistir el darte un beso,
un tierno beso.

Al acercarme un deseo me asaltó,
una travesura picaresca,
una idea erótica
o una aventura repentina

Me detuve a unos pasos
y liberé mis ataduras,
liberé mis inhibiciones
mientras caí la ropa.

Avance una vez más,
al llegar incliné mi cuerpo
acerqué mi rostro al tuyo
y deposité mis labios en los tuyos.

Tus ojos se abrieron
y tu mirada se fijó en la mía,
tus manos avanzaron
hasta posarse en mi espalda.

Varias, varias veces
nuestros cuerpos se atacaron,
entre gemidos, suspiros y arañazos
terminamos la contienda.

Nos abrazamos y nos besamos
y así hasta que en la noche nos sseparamos.